Tengo que confesarles que yo no soy como uno de esos teólogos que se adentran en el desierto y regresan cargados de sabiduría.
He recorrido muchas hogueras de cocinar y he esparcido cebo de angelote en toda suerte de dormitorios.
He aprendido a protegerme de todos los conocimientos o la sabiduría que haya podido adquirir en el transcurso de mis viajes, pues a veces 'el viejo padre académico' como el mítico Cronos, sigue mostrando una fuerte inclinación a devorar a sus hijos antes de que hayan alcanzado al capacidad de sanar o sorprender.
EL EXCESO DE INTELECTUALIZACIÓN PUEDE DESDIBUJAR LAS HUELLAS DE LA NATURALEZA INSTITNTIVA DE LAS MUJERES...
Dra. Clarissa Pinkola Estés.
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